- Jilgueros,
verdecillos, verderones, pinzones, mirlos y petirrojos tuvieron un mal año
reproductor en 2012, según los resultados del programa Paser de seguimiento de
aves de SEO/BirdLife. Los datos se recogen en 60 puntos distribuidos en 23
provincias de 12 comunidades autónomas. Se capturaron cerca de 19.000 aves de
124 especies en 2012
- La meteorología
extrema de la primavera pudo afectar a su éxito reproductor. En 2012, según
AEMET, mayo, junio y julio fueron más secos y cálidos de lo normal. Con medias
de temperatura de más de 2ºC con respecto a otros años y valores de
precipitación media inferiores al 50%
- Los datos
preliminares de la campaña de estudio de 2013, que termina en agosto, hacen
temer que este no sea un buen año tampoco. En este caso ha sido una primavera
mucho más fría de lo habitual, con el junio de temperatura media más baja desde
1997
Las primaveras extremas no ayudan a la reproducción
de las aves comunes según indican los estudios de SEO/BirdLife, la entidad
científica y conservacionista que, desde 1954, estudia las aves y la naturaleza
en España. En 2012 y 2013 se han sucedido primaveras más cálidas y secas de lo
normal o más frías y húmedas de lo habitual. En ambos casos, la productividad de
aves comunes como el jilguero, el verdecillo, el verderón, el pinzón, el mirlo y
el petirrojo han sido más bajas. Los estudios comparativos se llevan a cabo
sistemáticamente desde 1995 y tienen como base datos recogidos en 60 puntos
distribuidos en 23 provincias de 12 comunidades autónomas. Unos 19.000
ejemplares de 124 especies distintas de aves fueron estudiados en la campaña del
Paser de 2012.
Sobre 2012
Una vez analizados los datos se ha comprobado que, en
líneas generales que 2012 no fue un buen año para la reproducción de las
pequeñas aves comunes. Los análisis realizados con los datos de las
estaciones Paser en relación a la productividad mostraron valores más bajos que
otros años (es decir, volaron menos aves jóvenes que otros años en
relación al número total de aves capturadas), y esto pudo ser debido a que los
meses en los que tiene lugar la época de cría (mayo, junio y julio), fueron de
los más cálidos y secos en los últimos años. Los datos de AEMET muestran valores
de temperaturas medias de más de 2º C con respecto a otros años, y valores de
precipitación media menores al 50%). El mes de abril, que fue el momento de
inicio de la temporada fue, por el contrario más frío y húmedo de lo
habitual.
En concreto de las 20 especies más capturadas, y para
las que se han analizado los datos, 15 presentaron una productividad
menor. Son el mito,
jilguero europeo, verderón común, pinzón, serín
verdecillo, agateador europeo, cetia ruiseñor, petirrojo
europeo, ruiseñor común, mirlo común, curruca capirotada,
curruca cabecinegra, herrerillo común, carbonero común y
gorrión molinero.
Por tomar algunas de estas aves como ejemplo del mal
año que pasaron en la reproducción, SEO/BirdLife ha escogido las cuatro especies
de fríngilidos que se estudian en el Paser (son aves comunes muy conocidas por
su canto y que se alimentan de semillas), y al mirlo y al petirrojo europeo.
Todas ellas son especies fácilmente reconocibles y que se pueden ver de forma
habitual incluso en las ciudades.
Esta ave de llamativos colores (rojo, negro, blanco y
amarillo) es habitual en nuestros campos y se alimenta principalmente de las
semillas de los cardos. Es conocido vulgarmente como “colorín” y es fácilmente
distinguible en vuelo porque suele ir en pequeños grupos y al abrir las alas se
reconoce una franja blanca. Aunque no presenta una tendencia negativa ha tenido
su peor año desde que comenzó el Paser.
Es el más pequeño de los cuatro fringílidos
estudiados, de color verde amarillento, y es común verlo posado cantando infatigablemente. El índice de productividad
calculado en 2012 es el más bajo desde 1998 y su tendencia general es
negativa.
Es similar al verdecillo pero más grande y con el
pico más fuerte. Como su nombre indica es de color verde y su fuerte pico le
ayuda a abrir las semillas de las cuales se alimenta. Su tendencia general es
negativa.
Típico de ambientes forestales por lo que, aunque en
ocasiones se puede ver en nuestros
pueblos y ciudades es más común en los bosques. Tiene un tamaño similar al
verderón y es habitual observarlo alimentándose en el suelo junto a más
individuos. El 2012 fue su peor año de toda la serie estudiada, aunque en
general su tendencia no es negativa.
Es muy común en los jardines de las ciudades: negro,
pico naranja (los machos, las hembras son más pardas y menos llamativas), y se
mueve por el suelo moviendo la hojarasca y buscando pequeños gusanos de los que
se alimenta. En la época reproductora comienza a cantar aún de noche. Su
tendencia general es positiva, pero 2012 ha sido su peor año desde
2005.
Es una de las aves más reconocibles, además de por su
pecho naranja rojizo por ser un ave curiosa y que se suele acercar bastante a
las personas. Su dieta varía a lo largo del año, pero es fundamentalmente
insectívora. Su tendencia es ligeramente negativa y 2012 fue su peor año desde
el inicio del estudio.
El descenso en 2012 en los índices de productividad
de aves comunes en España es similar a lo que pasó en otros países
europeos en los que también se
realiza este programa de seguimiento. La metodología es común y se lleva a cabo
de forma homogénea en numerosos países europeos, donde es conocido como CES
(Constant Effort Site, lugares de esfuerzo constante). En
Gran Bretaña, por ejemplo, fue también un mal año para las aves, pero por el
clima contrario al nuestro. Las excesivas lluvias unidas a las bajas
temperaturas hicieron que fuera una pésima temporada de cría. En España la
primavera de 2012 fue una de las más cálidas y secas desde hacía
años.
¿Y en 2013 qué está pasando?
Según AEMET, este año 2013 ha tenido el mes
de junio más frío desde 1997 y también algo más seco, lo que seguramente habrá
afectado a la temporada de cría de este año. Alguno de los colaboradores de
SEO/BirdLife así lo han comunicado, es decir, es posible que la temporada de
cría se haya retrasado y las primeras puestas de algunas especies hayan
fracasado debido al frío y la falta de alimento que conlleva el mal tiempo.
Cuando se analicen los datos se ofrecerá información más precisa al
respecto.
¿Qué es el programa Paser?
Paser
es un programa de seguimiento de SEO/BirdLife de las aves comunes
reproductoras mediante el anillamiento. Permite capturar las aves,
identificarlas, datarlas y sexarlas por ornitólogos expertos. Esta información
será posteriormente analizada para conocer la evolución del número de pollos con
respecto a los adultos que hay cada año. Esto se conoce como
productividad (calculado como el porcentaje de jóvenes capturados
respecto al total de capturas de aves en cada estación y año). También
permite conocer posibles variaciones en la aparición de los juveniles y la
evolución en el número de adultos. Otros datos que se analizan son fenológicos,
observando las fechas de aparición de los migrantes, adultos reproductores,
primeros jóvenes del año, etc. La fenología es la ciencia que estudia la
relación entre los factores meteorológicos y climáticos y los seres vivos.
Anillamiento en el marco del programa Paser ©Manolo
Carregal y Graciela Fernández
El objetivo de los programas de seguimiento de aves
de SEO/BirdLife es conocer los tres parámetros básicos que establecen el estado
de conservación de cada especie: área de distribución, tamaño de población y
evolución de la misma en cada caso. Todo ello ayuda a tener una radiografía del
estado de la avifauna española, y también de la naturaleza en su conjunto. Hay
que tener en cuenta que las aves son excelentes indicadores del estado de la
biodiversidad, no sólo porque las tendencias de sus poblaciones integran muchos
factores ecológicos sino también porque están presentes en todos los hábitats,
son muy sensibles a los cambios ambientales y son, generalmente, fáciles de
muestrear. Por ello, estudiar las aves silvestres es también saber más sobre el
estado de conservación del territorio.
“Estudiar las aves silvestres es también conocer más
sobre el estado de conservación del territorio. Algo imprescindible si queremos
construir futuro en el medio rural”, afirma Asunción Ruiz, directora ejecutiva
de SEO/BirdLife. “Velar por
nuestro patrimonio natural, nuestra verdadera riqueza, es sin lugar a dudas la
base de nuestro bienestar. No en vano, el Eurostat incluye el estado de las
poblaciones silvestres de aves como uno de los indicadores del grado de
bienestar y desarrollo humano de cada estado de la UE”, añade la responsable de
la ONG.
Estaciones de “esfuerzo constante”
En el Paser se trabaja en “estaciones”. Estos son
lugares elegidos por los anilladores, en los que se han de realizar al menos 10
jornadas de campo distribuidas en el periodo reproductor (de finales de marzo
hasta agosto). En estos lugares se ubican las redes japonesas con las que se
capturaran las aves que se serán identificadas, datadas, medidas y liberadas una
vez anilladas. Las redes siempre se colocan en el mismo lugar durante todas las
jornadas, y se establece un esfuerzo de cinco horas desde el amanecer, es decir,
la jornada de campo siempre comienza antes de que se haga día y, por tanto, el
horario varía a medida que la hora de salida del sol varía. Cada año, los
anilladores de la estación volverán al mismo lugar a repetir el muestreo, y con
los datos obtenidos se podrán analizar diversos parámetros de las aves comunes
reproductoras en nuestro país, ya que se repiten las mismas condiciones en los
mismos lugares en las mismas fechas todos los años.
En 2012 trabajaron cerca de 60 estaciones
distribuidas en 23 provincias de 12 comunidades autónomas. Se capturaron cerca
de 19.000 aves de 124 especies que, una vez identificadas,
tomadas las medidas y anilladas fueron liberadas de nuevo al medio. Cada año
se analizan los datos de, al menos, 20 especies. Se eligen las
que más se capturan y, por tanto, las más comunes, para que los análisis tengan
más datos y consistencia. Estas aves comunes son también las más abundantes en
los hábitats en donde se ubican las estaciones Paser, como sotos de ribera y
carrizales.
Cada estación está a cargo de un anillador, que es el
responsable de enviar los datos informatizados cada año a la coordinación del
Paser en SEO/BirdLife. Además es necesario contar con más personas que puedan
colaborar en las estaciones durante cada temporada, ya que el esfuerzo de
muestreo es alto.
Todo este esfuerzo se realiza por voluntarios que
dedican su tiempo libre al estudio de las aves silvestres. Más de 500
personas salen al campo cada temporada a realizar las 10 jornadas del Paser con
el único objetivo de aumentar el conocimiento del estado de las aves
reproductoras silvestres.